16-1-09

Hoy ideas no tengo
y no merezco ni desayuno,
que no veo el treinta y uno,
ni mal dormir prevengo.

Tampoco caigo suave
y se quedó frío el cerebro,
mis cantos no celebro
ni feliz despedida que acabe.

No es menos por salir,
escaldados o preocupado,
al centímetro encrespado
ni el sueño por pulir.

Pero no le busques substituto
de los que entran a saco,
pues ante lo justo, opaco,
y si paro, quedo irresoluto.

En fin, alegre compañía
que ya van por finales,
de unos tantos triunfales
y el resto futuro señal bruñía.

Y tal cual sin rendirse
que no escrito está el cuento,
¡valor, esfuerzo, y suerte al ciento,
y bendición al despedirse!